Debido a que no existía aún un organismo regulador a nivel nacional en España, tanto el club madridista como el resto de equipos que fueron germinando en todo el panorama nacional se dedicaron a competir en los correspondientes campeonatos regionales, compaginándolos con los habituales encuentros amistosos. Como muchas otras la sección madridista no tuvo continuidad y desapareció durante ese período, si bien no llegó a nacer oficialmente, tercera equipacion real madrid y no fue hasta noviembre de 1944 cuando vería la luz de manera oficial.