Con William Barnes en el banquillo, el equipo del Athletic lo formaban los siguientes jugadores: Ibarreche bajo los palos, Solaun y Hurtado formando una férrea defensa, la tenacidad de Eguía, el coloso José María Belauste, que imponía su presencia en el centro del campo al igual que su hermano Ramón, o la inquietante delantera formada por Iceta, Germán, Apón, Zuazo y Rafael Moreno, “Pichichi”. Este último había rechazado varias ofertas de clubes ingleses que le ofrecían un contrato profesional con muy buenas condiciones, sin embargo, prefirió quedarse en Bilbao.